En cualquier orden de la vida la (buena) comunicación es vital. Si tomamos la construcción como ejemplo podemos hablar de la cadena: arquitecto-jefe de obra-obrero. De forma similar, la capacidad de comunicación de un equipo de proyectos tecnológicos juega un enorme papel en el éxito o fracaso de un plan. Si se nos permite la analogía, podríamos decir que un informático es una interfaz entre personas y máquinas. Una de las premisas para que un equipo de trabajo esté bien coordinado es que haya una comunicación eficaz entre sus miembros.
Una comunicación eficaz ayuda a entender mejor los proyectos. El primer lugar donde falla la comunicación es en el entendimiento de los requisitos. Entender lo que el cliente quiere y necesita. En el caso de los profesionales técnicos, el buen entendimiento no solo se circunscribe a los compañeros, sino también a los clientes. El profesional debe comunicar de forma sencilla conceptos e informaciones complejas. Parafraseando a Einstein: “todo debe ser lo más simple posible, pero no más simple”.
Entender al cliente
Los grandes emprendedores actuales tienen una característica que los separa de las generaciones anteriores: fantásticas capacidades comunicativas. Hoy el experto no solo debe ser capaz de programar, sino de mantener una comunicación fluida con todos sus interlocutores. En especial, hay que escuchar y entender las necesidades del cliente. Esa capacidad del profesional para escuchar, saber entender y poder comunicarse con el cliente con un lenguaje accesible tiene un valor en el sector difícil de cuantificar.
Así, los técnicos de la informática deben dominar los dos lenguajes que dan soporte a su profesión, los lenguajes de programación, y el lenguaje humano, con sus infinitos matices, que permite la comunicación entre personas, sin olvidar cómo ahora la inteligencia artificial, y el análisis semántico de la información, mezcla ambos entornos más que nunca.
9 claves para mejorar la comunicación:
- Escuchar: uno de los fundamentos de la comunicación eficaz es la facultad de escuchar al otro. Si no escuchamos con atención al compañero de trabajo o al cliente, difícilmente vamos a poder alcanzar juntos un resultado satisfactorio.
- Claridad: la comunicación, para que sea efectiva, ha de ser clara y concisa. Si se trata de un texto, conviene leerlo varias veces para que sea lo más sencillo y resumido posible.
- A tiempo: para que la comunicación sea efectiva, se producirá en el momento adecuado.
- Respeto: adoptar una postura respetuosa que valore las distintas opiniones y puntos de vista. No confundir a las personas con los problemas.
- Tecnicismos: evitar la tentación de emplear un lenguaje muy técnico, en especial si nuestro interlocutor no lo es. Podemos hacer uso de gráficos y diagramas para explicar el contenido.
- Barreras culturales: a veces nuestro interlocutor proviene de otra cultura y piensa en un idioma diferente. La empatía nos ayudará a ponernos en el lugar del otro.
- Feedback: al lanzar nuestro mensaje estamos expuestos a ser criticados. Hay que aceptar con humildad y amplitud de miras la crítica. Así nos acercaremos más a una solución satisfactoria.
- Confianza: nos permitirá transmitir de manera más efectiva nuestras ideas y conocimiento. Un profesional seguro de sí mismo aceptará la crítica como una aportación de información y no como algo personal.
- Autocrítica: juzgar nuestro propio trabajo nos ayudará a mejorar, tomaremos decisiones más eficaces y utilizaremos la crítica ajena como información positiva para crecer en el ámbito profesional y personal.
