No solo tuvimos la oportunidad de atender al European Captive Summit 2022 que se celebró el 30 de junio en Ámsterdam, sino que José María Corsino, partner en Delonia Software, fue uno de los ponentes. A lo largo del día unos 60 Captive Owners & Proffesionals pusieron de manifiesto la realidad del momento en el que se encuentra la práctica del negocio de las cautivas.
Cautivas: mitos y realidades
Los Captive Owners hicieron hincapié en la necesidad de explicar con claridad qué es una cautiva, pues con frecuencia el público lo poco que sabe de estas compañías es que están radicadas en lugares como Luxemburgo, Países Bajos, Irlanda o Suiza, donde hay una baja fiscalidad y una regulación que favorece a la industria. En el caso de las aseguradoras cautivas los activos financieros se mantienen en lugares donde hay una baja fiscalidad con el objetivo de proteger un capital que se utiliza para salvaguardar a la compañía, sus activos y empleados.
Cautivas: ¿costes o beneficios?
Uno de los temas más interesantes de los que se trató en la reunión de Ámsterdam llevó como título: Captive Operations and Effective Risk Management Practices (Operaciones de las cautivas y prácticas eficaces de la gestión de riesgos). Las empresas a priori dan por sentado que la cautiva es un centro de costes (en oposición a un centro de beneficios) y el objetivo perseguido es el break-even. Los participantes llegaron a una conclusión que podría parecer sorprendente: las cautivas suelen suponer un beneficio financiero para la compañía madre. Lo que plantea un problema: ¿qué hacer con esos recursos extras? Además de la respuesta obvia: establecer reservas para compensar siniestros y proveer fondos de autoseguro. Otra posibilidad interesante y que a menudo se olvida, es invertir una parte de esos recursos para mejorar la digitalización, la modernización del negocio y, por tanto, aumentar así su rendimiento, además de mejorar la facilidad de gestión y del cumplimiento normativo.
Ciberriesgo: una amenaza difícil de medir
Otra cuestión que dio lugar a un productivo intercambio de ideas entre los panelistas fue la parte titulada: Financing and Obtaining Efficiente Capacity for Cyber Insurance (Financiación y eficiencia en el ciberseguro). Las amenazas de ciberseguridad son uno de los mayores riesgos a los que se enfrentan las empresas hoy en día. Actualmente las compañías están más preocupadas por los riesgos que entrañan los ciberataques que por otras amenazas como desastres naturales o cortes en la cadena de suministro. Un hecho avalado por este estudio realizado por Allianz. Medir el riesgo en este aspecto es muy difícil, además de lo complicado que es encontrar suficiente cobertura en el mercado. Por tanto, en el caso de una compañía grande, solo una cautiva podrá ofrecer la capacidad suficiente para cubrir el riesgo.
La inestable coyuntura global
El mundo se enfrenta en estos momentos a un panorama que no es el más favorable. La pandemia, la guerra de Rusia, el conflicto comercial con China, la disrupción en la cadena de suministros y en la distribución, la inflación… La complejidad del momento presente hace que en un buen número de ocasiones solo la cautiva (y no una simple aseguradora externa) pueda dar respuesta a los retos actuales.
El simposio concluyó con la certeza de que las cautivas no solo suponen la mejor posibilidad para gestionar el riesgo de las grandes empresas, sino que su correcta implementación se traducirá en un beneficio para la misma no solo en el ámbito de los servicios sino también en lo que se refiere a los recursos financieros.